Levantar alas como águilas...

Génesis 1: 26,27

21.09.2009 08:29

"Entonces dijo Dios: hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias en toda la tierra y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó". Génesis 1: 26,27
 
Definitivamente, todo ser humano ha nacido en el corazón de Dios. Él lo creó todo y toda su creación fue puesta a disposición del hombre y de la mujer para que hicieran buen uso de ella. Dios no tiene cuerpo físico. Él es Espíritu; por ese motivo, nosotros fuimos creados a su imagen y semejanza porque tenemos una parte espiritual que nos permite comunicarnos con Dios y vivir en armonía con Él.

Si la persona no cultiva su espíritu será presa del pecado porque su carne, sus emociones, su corazón endurecido y su mente pecaminosa le harán sucumbir. Por el contrario, nuestra vida toma un rumbo diferente cuando aceptamos que es nuestro espíritu en total comunicación con el Espíritu Santo de Dios lo que nos va a permitir escuchar y reconocer la voz de Dios la cual nos dará instrucciones preciosas y precisas para que transitemos por un camino bueno y seguro. Nuestro ser espiritual debe ser alimentado todos los días con la Palabra. Así, como cuando fuimos a la escuela, al colegio o a la universidad y adquirimos conocimientos para llevarlos a la práctica en nuestros trabajos; de igual manera, debemos graduarnos en la universidad de la Palabra con el fin de que nuestras vidas y nuestro entorno sean trasformados para la Gloria y la Honra de Dios.

Que el fuego del Espíritu Santo de Dios arda en su interior y que esa relación con Él produzca un avivamento en su vida. 

Que el Señor los bendiga.

Contacto

Lilliana María Incera Villalta

lincera03@hotmail.com

San José, Costa Rica

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